El Sol Scène de Haití busca promover la consciencia social utilizando el arte. Su proyecto RCHD se enfoca en fomentar el diálogo, la cooperación y la fraternidad entre haitianos y dominicanos. Dirigida por Led by Daphné Menard, la asociación pone énfasis en el poder transformador del arte para abordar divisiones de larga data entre comunidades vecinas.
En 2018, una asociación con sede en Haití conocida como Association Culturelle Sol Scène lanzó un proyecto consistente en una serie de residencias artísticas transdisciplinarias en torno a la Masacre del Perejil, de 1937, en la que decenas de miles de haitianos fueron asesinados por orden del dictador dominicano Rafael Trujillo. La idea era reunir artistas haitianos y dominicanos cuya obra sobre este tema podría crear un espacio para el diálogo y la reflexión en torno al traumático episodio de la historia de la isla.
El reconocido éxito de esta iniciativa dentro del escaso intercambio cultural y artístico entre las dos naciones creó el marco para lo que ahora es un evento anual conocido como Reencontres de Creacion Haitiano-Domincaine / Reencuentros de Creación Haitiano-Domincanos (RCHD). Este complejo evento, cuya tercera edición está prevista para enero de 2024, abarca varios meses de laboratorios artísticos, talleres, charlas, proyecciones, conferencias, exhibiciones y demás, a los que son invitados a participar artistas haitianos y dominicanos de formación muy variada. Una performance centrada en el conocimiento ancestral compartido y en la solidaridad fraternal, un taller que inicia en el arte del Djing a mujeres jóvenes haitianas y la proyección/debate de una película, precedida por el análisis de un realizador dominicano sobre las experiencias haitianas son ejemplos de la variedad de trabajos presentados en años recientes.
Detrás del proyectó está un joven artista transdisciplinario llamado Daphné Menard, director artístico de RCDH y fundador de Sol Scène. Junto con su devoto equipo de colaboradores, ha impulsado sin cesar el crecimiento de esta iniciativa, que hasta ahora ha sido acogida sobre todo en las capitales de los dos países. En una entrevista con C&AL, Menard comparte sus reflexiones sobre el proyecto, la próxima edición, el modo en que la inestabilidad sociopolítica de Haití ha afectado sus esfuerzos y el papel del arte en la mitigación de agravios entre pueblos separados.