«Negros Indícios: performance video fotografía», curada por el historiador de arte Roberto Conduru, presentó en total obras de doce artistas, muestra importante aunque no enteramente representativa de la diversidad de la escena performática negra de Brasil.
Pregando a palavra (Predicando la palabra), 2017, de Moisés Patrício, exposición Negros Indícios, Caixa Cultural, São Paulo . Foto: Barbara Cunha.
En simultáneo con la muestra, realizada entre octubre y diciembre de 2017, se hizo un ciclo de cinco performances y se publicó un catálogo impreso bilingüe (portugués/inglés) que incluía textos del curador y de los artistas, además de una bilbiografía específica sobre el tema. El conjunto de aciones emprendidas en Negros Indícios tiene valor porque ayuda a delinear y documentar la presencia negra en las artes visuales contemporáneas.
La exposición surge en un ambiente cultural que desde hace aproximadamente cinco años ha visto surgir muchos artistas interesados en explorar las potencialidades de la performance (re)accionando a lo que está socialmente (im)puesto en una sociedad estructuralmente racista. Las obras provocan discusiones con recursos que van de la denuncia del racismo, presente en algunas más que en otras, a los usos líricos de los colores, como el rojo en el caso de Musa Michella Mattiuzzi –Experimentando o vermelho em dilúvio (Experimentando el rojo en el diluvio), 2013–, y Caetano Dias –Rio Doce (Río dulce), 2016– o el blanco en el caso de Dalton Paula –A notícia (La noticia), 2013–.
Laços (Lazos), 2017, Priscila Rezende, exposición Negros Indícios, Caixa Cultural, São Paulo . Foto: Barbara Cunha.
Cuidadosa en la presentación de un mapa de las zonas de Brasil en que ha surgido esa «presencia negra», la exposición incluye trabajos de artistas de Bahía: Ayrson Heráclito, Caetano Dias, Rommulo Vieira Conceição, Tiago Sant’Ana; de Brasilia: Antonio Obá y Dalton Paula; de Minas Gerais: Priscila Rezende y Rubiane Maia; de São Paulo : Musa Michelle Mattiuzzi, Moisés Patrício, Renata Felinto y, por último, de Pernambuco: João Manuel Feliciano. Esta división regional también tiene otros sentidos si consideramos temas como el pelo en las obras de Feliciano, Felinto, Sant’Ana y Rezende, o el acto de posar y danzar en espacios naturales o construidos socialmente, presente en las obras de Conceição, Dias, Felinto, Maia. Otro tema abordado es la relación entre acción ritual y memoria, que aparece en Heráclito, Obá, Patrício, Sant’Ana y Felinto.
Brunch para Exu (Almuerzo para Exu), 2013, Renata Felinto, exposición Negros Indícios, Caixa Cultural, São Paulo. Foto: Marina Arruda.
La procedencia diversa de los artistas convocados tiene estrecha conexión con el lugar en el que se hizo la exposición, la Caixa Cultural de São Paulo , en la Praça da Sé, y con la propia ciudad, en la que inmigrantes de diferentes puntos del país atraviesan ese marco cero de la memoria urbana.
Corpo em quadrado P (Cuerpo en cuadrado P), 2012, Dalton Paula, exposición Negros Indícios, Caixa Cultural, São Paulo. Foto: Heloá Fernandes.
Es interesante notar cómo dos trabajos de Renata Felinto, que discuten la alteridad, tienen lugar íntegra o parcialmente en esa plaza: Brunch para Exu (Almuerzo para Exu), 2013, y Danço na terra em que piso (Bailo en la tierra que piso), 2013. La misma relación entre cuerpo, espacio y producción de sentido emerge en uno de los trabajos de Rommulo Vieira Conceição: O espaço se torna lugar na medida em que eu me familiarizo com ele (El espacio se vuelve lugar en la medida en que me familiarizo con él) (2015/2017).
Interior de la exposición Negros Indícios, Caixa Cultural, São Paulo, 2017. Foto: Barbara Cunha.
A pesar de que Negros Indícios reunió un conjunto de obras y artistas relevantes para el (re) dimensionamiento de la escena performática negra y sus relaciones con la fotografía y el video, la exposición presentó algunos problemas: el primero de ellos fue que la escenografía de algún modo reforzó la relación entre producción artística negra y precariedad. Elemento concreto entre tantos contenidos digitales, la escenografía interfirió con el disfrute de las obras. Otro aspecto que podría ser cuestionado es el armado de un conjunto grande de obras digitales, exhibidas en las tres salas, que confundió el registro de performance con los de fotoperfomance y videoperformance y creó una zona indiferenciada entre esos lenguajes. Pero a pesar de esos «ruidos», Negros Indícios aportó una contribución importante para la promoción de la escena artística negra en la intersección de los campos de performance, video y fotografía que, así reunidos, ponen de manifiesto la potencia de la muestra como experimento curatorial.
Alexandre Araujo Bispo es antropólogo, crítico, curador independiente y docente.
Traducción del portugués: Nicolás Gelormini